miércoles, 8 de febrero de 2012

amy hyempel

ESTA NOCHE ES UN FAVOR PARA HOLLY
Amy Hempel

Traducción: Erik Escudero
Una cita a ciegas viene a recogerme ahora mismo, y a menos que mi cabello crezca una pulgada para las siete en punto, no voy a contestar la puerta. El problema es lo de enfrente. Me corté el fleco yo misma y ahora parezco Mammie Eisenhower.
Holly dice que no, Holly dice que me parezco a Claudette Colbert. Pero yo sé que lo dice sólo para que salga con este tipo. Lo de esta noche es un favor para Holly.
Lo que me gustaría hacer es lo que solemos hacer –mesclar nuestro ron con el refresco de Cola y beberlo sobre la arena mientras el Sol se pone.
Vivimos la vida de la playa.
No la del bloqueador solar y la ropa ligera. Quiero decir, nosotras sólo vivimos en la playa. Afuera de la puerta principal hay arena. Está el océano y nosotras lo vemos todos los días del año.
La playa está cerca del aeropuerto –así que este pueblo ni siquiera cuenta con esa clase de tipo “despreocupado” de L.A. Lo que tiene es personal de aerolínea. Para ellos es un trayecto en autobús de doce minutos desde casa hasta el aeropuerto –casa significa un complejo de apartamentos construidos en una falsa Colonia Española.
Han copiado las misiones españolas en todas direcciones. Pero alguien debería enseñarme las misiones antiguas que de verdad tenían barandales de hierro forjado a los lados.
También, hay un patio con fuente que salpica en mosaicos y azulejos. Lo más irritante es que los azulejos han sido tratados químicamente para dar esa impresión de “viejos” desde un principio. Lo que ellos quieren que digas es “Mira: restos de reliquias” ¿sabes?

El lugar se llama "Rancho La Brea", pero en realidad lo llaman "Rancho Líbido" por las azafatas. Adentro, los apartamentos tienen techos blancos y brillantes.
Holly no es una azafata, ni yo tampoco. Rentamos por mes mientras nuestra casa es reparada por los daños que causó el lodo y el agua de la temporada pasada.
Holly es cantante de acompañamiento, y algunas veces ha grabado como solista. La idea era que ella estaría de gira y la mayor parte del tiempo tendría el departamento para mí. Pero ella no está de gira. La distribución de su último lanzamiento sólo tuvo la mitad del alcance que ella esperaba. La compañía disquera dijo que tenía que reorganizar su lista de talentos marginales, así que mientras Holly busca una nueva disquera, ella está por la casa en las noches y mis tres días libres.
Cuatro días a la semana conduzco a La Miranda, a la agencia de viajes en la que trabajo. Me toma cincuenta y cinco minutos conduciéndo en la misma dirección, y desearía que el trayecto fuera más largo. Me gustan las personalidades de la radio y me gusta cambiar continuamente de carril. Olvidarte de todo en la autopista es como vivir en la playa -ni siquiera estás consciente del tiempo que pasa, y de repente estás allí, en el lugar al que te estabas dirigiendo.
Mi trabajo es perfecto. No hago nada, no me pagan nada pero -lo adivinaste- es mejor que nada.
El sentido del humor ayuda.
El lema de la agencia es: "Nosotros Nuca Arruinaremos Tus Vacaciones A Propósito".
Hacemos dos grandes tours guíados al año, pero ninguno de los dos ocurre ahora. Si juego bien mis cartas, este va a ser el trabajo que tenga hasta que mis padres mueran.

Pensé que me molestaría que Holly estuviera siempre en casa, pero resulta que está bien. Por las mañanas, caminamos hasta "Casa de Fruta Fruit Stand and Bait Shop". Todo allí tiene el tamaño de otra cosa: las fresas son del tamaño de tomates, las manzanas son del tamaño de toronjas, las papayas tienen el tamaño de melones. El "día de rebajas sobre el precio" ya va en su tercera semana. Compramos sólo lo suficiente para llenar una licuadora, más los huevos.
Pero un momento, regresemos un poco, porque antes de ir a Casa de Fruta, nos ponemos las Danskins descoloridas y los pántalones cortos del ex novio boxeador de Holly, y luego nos quedamos en la playa mirando el jeep del salvavidas que avanza dejando líneas como peines en la arena enredada.
Me gusta que mis huellas en la arena sean las primeras del día. Holly es la que raspa sus pies ennegrecidos y maldice al alquitrán.
Entonces el resto del día pasa. Tal vez vaciemos medio tanque cruzando el territorio de Holly. Holly lo llama "investigación", mirar hombres en la arena de más al norte.

"Anteriormente me había alejado de toda sal del mar, y había dicho que era una vida" dice Holly. "Pero está toda esta investigación abierta".
A veces, visitamos a Suzy y Hard, los ilegales que viven al final de la cuadra. Su cabaña de aluminio ha estado allí durante años. La historia es que él la encontró en el puerto.

sábado, 13 de noviembre de 2010

SENTADA EN LUNA PARK

Y la historia se desarrollaba en Luna Park

Un lugar en el que nunca había estado

Y del que poco o nada sabía

Si descontamos las imágenes periféricas de viejas películas

Que había visto en mi juventud.


Así que ahí estaba yo, te digo

En medio del paseo marítimo

Y había algunos niños negros, tres o cuatro

Cantando algo que, por el contexto, no debía ser nada más

Que una rima de rap

Una melodía un tanto pegajosa que no obstante

A mí me recordó una trova yucateca

Una canción que hablaba de tragedias

Pasadas y por venir.


Y ahí estaba yo

Sentada en un banquito de Luna Park

Mirando la grandísima Montaña Rusa

Un ojo de luna

Y observando a las palomas que atravesaban el aire fresco

Arriba y abajo

Preguntándome ¿Qué clase de droga es esta?

¿Es qué no estoy en un punto de ciudad de México

Acostada en mi cama, con los efectos de los estupefacientes

Y del amor?

El amor que lo permea todo, para bien y para mal

El amor como el extraño cordón umbilical

Que te mantiene aferrado al planeta Tierra y a la mierda.


Y por un segundo pensé que acaso todo era obra

De un elaborado complot inter-espacial

Alguna clase de rapto extraterrestre

Pero estaba ahí, sentada en Luna Park

Y no había objetos voladores no identificados sobrevolando los cielos

Ni fuerzas galácticas que comprometieran mi juicio

Seriamente comprometido por la historia del desamor.


De tal manera que no había mucho más que hacer

Salvo esperar sentado y observar el paisaje

El hermoso paisaje del paseo marítimo

Y la feria y el asfalto impoluto por el que avanzaban

-avanzando hacia atrás y hacia adelante-

Los niños negros

Gesticulando y moviendo las manos con una rabia infinita.


Y cuál era el punto de esta extraña parodia de la comunicación

Yo, sentada sola en un banco de Luna Park

O acaso no era Luna Park

Sino el punto medio del espacio infinito

En donde me encontraba sola

Sin brújula de navegación, sin un mecanismo que me pudiera acercar a ti.


Y entonces, como de improvisto,

Me encontré de nuevo ahí, sola, sentada en Luna Park

Desprovista de ti

Absorta en el sueño imposible

En la fuerza concéntrica del amor

Un sueño imposible

Un ojo de luna perdido

En el extrarradio de la razón.


Y la sucesión de eventos, Dios bendito,

Era terrible

Porque te había perdido

Porque en la vida o en el sueño

Tu presencia me haría falta

Y mi mundo -¿este mundo?-

Se desvanecía a razón de pulsos eléctricos

La arquitectura y el paisaje se desvanecían ante mis ojos

Simple y maravilloso

El gris pixeleado que borraba todo lo que había enfrente

Porque el paisaje eran tus ojos

Y la arquitectura mis recuerdos

Y al tiempo que todo se caía en pedazos

Yo sentada en un banco de Luna Park

-mientras todo se convertía en aire de luna-

Me volvía nube.

sábado, 17 de octubre de 2009

sick, sick, music

Malviajes sónicos cortesía de su humilde e inconsistente escribano aquí mero
http://www.myspace.com/larevanchadeljingle

domingo, 14 de diciembre de 2008

DIGITAL HARDCOREEEEEEEEEEEE¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡

Queridos tres lectores:

El día de hoy no habrá nada de lo que se suele encontrar en este humilde blog, en su lugar dejaremos un bonito regalo navideño: A la mierda el funk EP. Se trata de un par de mezclas electrohardcoreras a un clasicote olvidado de Eddie Bo : Lover and a Friend y una ruidosa versión electro de Boston not L.A de The Freeze. Todos los beats son cortesía de su humilde escribano y el archivo no pesa nada así que siéntanse en total libertad de criticar lo que quieran.

http://rapidshare.com/files/173425536/A_la_mierda_el_funk_EP.rar

Ah, por cierto, pueden checar las susodichas canciones en sus versiones originales aquí mero. Un blues.






lunes, 17 de noviembre de 2008

...

La primera vez que Susana me miró a los ojos
Pensé que el mundo acabaría
Dos tercios de la población mundial vive estados de histeria
Me dijo.
La última vez que me emborraché terminé llorando en la sala
De mi casa, continuó,
No había razón alguna, pero lloraba
Lloraba por los niños en África y esas cosas.
Una vez leí en voz alta a Baudelaire y en la soledad de mi cuarto
Escuché una voz que decía mi nombre: Susana, Susana

Yo la escuchaba maravillado.
La conocí en la Facultad, cuando ella tenía 21 años,
Y cada vez que abría la boca decía algo hermoso y maravilloso
Y le gustaban las drogas
Especialmente la marihuana y los opiáceos
Aunque no le hacia el feo a los ajos y a las anfetas,
No como al alcohol.
Una chica maravillosa.
Lectora de Artaud y de Baudelaire y de un montón de poetas franceses,
Poetas fantasmas y desconocidos

Cada vez que me miraba a los ojos y hablaba
Yo empalidecía y una poiésis de estrellas lunares
Explotaba a su alrededor
El final y el origen mismo
De los tiempos y del sueño.
Una vez comió hongos y vio a Dios mismo
Lo vio en un árbol y ella se sentía- esas fueron sus palabras textuales-
Tan grande, tan enorme, y al mismo tiempo, pequeñita, pequeñita

Seria vulgar si la describiera físicamente
Baste decir que era el ser humano más hermoso que yo haya conocido jamás.
Durante mucho tiempo creí que era la reencarnación de Sexton o de Kafka
Pero en versión texmex
En versión chilanga
-Pensemos en la belleza y en la poesía, pero jamás en el dolor-

Un pez
Un Sol
Una muñeca viajera

Yo la escuchaba desconcertado
Mientras me contaba cuánto había llorado la muerte de su perro
Y ella fue a la escuela hecha un desastre
Y sus amigos le preguntaban angustiados: ¿Qué te pasa Susana?
¿Murió un familiar, te dejó tú novio? Ella les contaba la historia del
Perro y seguía llorando hecha pedazos y los amigos la miraban con desconfianza.
Yo escuchaba estas historias y no sabía qué pensar
De verdad que no

Una chica maravillosa.
Aún ahora pienso que nadie es capaz de hablar con ella más de 15 minutos
Sin enamorase como un desquiciado.
La mujer más hermosa y valiente de nuestra generación
Una poeta, sí, eso es, una poeta auténtica
Tal vez la única persona hermosa de nuestra generación
No estoy inventando nada, yo estuve ahí, yo la conocí
Me contó un montón de historias
Historias que ni te imaginas, y de algún modo su presencia, su belleza y su voz
Hacían que el mar de mierda en el que, nosotros defeños, navegamos
Tuviera, si no sentido, por lo menos un poco de esperanza.

Y la podías ver andando en la Facultad y recorriendo las circunvalaciones
De Ciudad Universitaria
Una Ciudad Universitaria de ultratumba, de pesadilla pura
Un agujero negro en donde se mezclaban la nulidad y el horror
Entre comunicólogos y reporteros disfuncionales
Una pesadilla hipercomunicacional

Ah, Susana;
Hermanos míos, era imposible conocer a Susana y no quererla
Ella se conectaba en el messenger y tú te ponías a temblar
Y está bien, su jodido nombre no es Susana, pero ustedes entienden
El amor de un reporterillo barato no es algo que se pueda cuantificar
Hermanos míos, son incontables las vidas que esta mujer ha tocado
Que ha salvado
Como incontables deben ser los corazones que ha quebrado
Porque ella te podía ofrecer el Universo entero y todos sus secretos en una sonrisa
Y lo más que tú podías regalarle era un poema barato
Y si alguna vez la encuentras entenderás de lo que hablo
Pensaras en los últimos días de Kafka y en muñecas viajeras
En los últimos amores

Porque querrás tanto que ella pudiera ser tu Kafka y tú su…

martes, 7 de octubre de 2008

25767…

2. Este es el tipo de historia que no quisieras contar. Piensa en aztecas, me dijo el martes. Piensa en persas, me dijo el viernes. Hace tres meses que internaron a Camila en un Hospital Mental. Vengo aquí los martes y viernes, le leo poemas y le digo que todo está bien, que lo lograremos, que esto no es más que un contratiempo pasajero.

Piensa en aztecas, piensa en persas.

3. Este es el tipo de historia que no quisieras escuchar. Sofía vino el martes a visitarme, puede que viniera también el viernes, no estoy segura. Fue un detalle lindo de su parte, supongo. Ella vino y me trajo una antología de poetas franceses.

4. En el Hospital Mental los pacientes entran y salen, algunos se curan algunos recaen, la mayoría son mujeres; en la antigüedad las quemábamos, en la antigüedad las amarrábamos a postes y las torturábamos y ellas se reían de nosotros.

8965. Pobrecita. Sofía viene aquí y me lee poemas y me habla del pasado y me dice que todo está bien. De alguna manera superamos las expectativas. Ella me abraza y llora y yo le digo que se hace tarde, que debe volver a casa.

6. ¿Estuviste ahí? ¿Alguna vez estuviste ahí?

7. Cosas en las que Sofía me pone al día:

En frente de la catedral de San Luis alguien escribió con aerosol en grandes letras rojas: DIOS NOS AMA. Nancy se matriculó en periodismo el semestre pasado. Repitió la prueba seis veces antes de aprobarla. Hace dos semanas en el Oasis un tipo sacó una .38 Súper y le disparó a una puta entre las piernas. Antes de salir del cuarto en donde la puta le hacia un privado el tipo se voló los sesos. Crimen pasional concluyeron los peritajes de la Colonia Roma…

…Si piensas que no te amo te equivocas. Sólo tienes que mirarme el corazón abierto. Como el sacrificio de un guerrero azteca… como el zoroastrismo persa… puede que no lo entiendas pero estoy ardiendo en amor.

6798. Tuvimos un sueño alguna vez, un sueño de amor y comprensión; pero de esto hace ya mucho tiempo, demasiado tal vez. Sonia se ha pasado las últimas dos semanas fumando esa nueva hierba que está circulando desde hace algunos meses. "Está así, súper risueña", me dice todo el tiempo. Basura sicosomática. Basura espiritual. El tipo que vive a un lado de mi apartamento me envió una petición de firmas para canonizar a San Fernando. Le dije que tenía que pensarlo.

Las paredes de la casa de Martin se han empezado a llenar de algo parecido a un moho verdoso.

9. Extraños recuerdos me vienen a la mente esta noche de enero. Una vez fuimos con Sonia, Sofía y yo, fuimos a su departamento del centro a buscar algo de chiva, pero era muy tarde y estábamos demasiado borrachas y llovía, y Sofía se tambaleaba y reía como una jodida idiota y yo le preguntaba: "¿Qué es tan divertido? ¿Qué es tan putamente divertido?" Y entonces ella me miraba con su rostro de ángel y respondía: "la lluvia, la puta lluvia"

Tres meses este enero. Me siento bien. De alguna manera al final todo acabara muy pero muy bien.

436908. El día que te conocí fue seis de octubre. Hoy es veintiséis de enero, han pasado tres años desde aquel momento. Llevabas un pantalón negro, sucio y arrugado, la misma camisa lavanda con la que te despedí el diez de noviembre. Nancy me dijo después que probablemente llevabas estudiando en la facultad más de dos meses, pero hasta aquel momento jamás me di cuenta de tu presencia. Y entonces un día dijiste algo estúpido y estuve a punto de llorar. Y jamás te lo mencione pero me robaste el alma. Y algo más tal vez, aunque ahora mismo no puedo estar segura de cómo o por qué. El reporte del clima no pronostica buen tiempo: cielos nublados con precipitaciones fuertes. En casa de Martin de las paredes empiezan a brotar una especie de moho verdoso. En frente de la catedral de San Luis alguien escribió con aerosol en grandes letras rojas: DIOS NOS AMA.Y se que nunca lo entendiste pero pasa todo el tiempo: amar, dudar.

6768097. El amor se encuentra infravalorado estos días. Las mujeres y los hombres modernos no entendemos que no hay nada que entender. Todo es sexo y multinacionales. Pienso en tiempos mejores, en tiempos afásicos en donde la humanidad y la vida no encierren misterio alguno. Pienso en el amor y en los tiempos que vendrán. Como un poema. Como una ciudad fantasma, como una continua sucesión de equívocos; una radiografía de los abismos de la existencia, una panorámica de los nahuales que habitan los rincones del desierto de Sonora, las penas de Rulfo, las putas de México Distrito Federal.

domingo, 7 de septiembre de 2008

GZA/The Genius. Pro tools


Sexto disco en estudio de uno de los Mc´s más influyentes en la historia del hip hop. Pro tools salió a la venta hace un par de semanas en Estados Unidos precedido por las confrontaciones verbales entre Gza y el infame 50 Cent e inmediatamente obtuvo, en su mayoría, reseñas y críticas aceptables. Gary Grace a.k.a Gza The Genius, miembro fundador del Wu Tang Clang y uno de los primeros promotores del hip hop (su larga experiencia en solitario data desde 1984), le dedicó a 50 el track "Paper Plate",uno de los mejores temas de la flamante placa y uno de los mejores diss que se hayan grabado recientemente. Como en México resulta poco menos que imposible hacerse con una copia original me permito subir el disco en mediafire. Más adelante le daremos una revisión a la biografía de uno de los mejores exponentes del verdadero hip hop (en mi opinión el mejor y más congruente mc de todo el Wu Tang Clan). P.E.A.C.E


http://http//www.mediafire.com/file/g27xbofm28f/lospoetassonuncáncer.blogspot.GZA_(Genius)-Pro_Tools-2008-.rar

miércoles, 3 de septiembre de 2008

BAD BRAINS 4 LIFE

Bad Brains cambió la manera en que se concebía el punk a principios de los 80s. Ninguna otra banda de la época, a excepción tal vez de Hüsker Dü, alcanzó nunca la mitad de la calidad, furia y velocidad que escupían estos cuatro jóvenes negros provenientes de Washington D.C. Son considerados los padres del hardcore al instaurar un estilo en el que se combinaban los alaridos de HR y los ritmos extremos de Dr. Nowk(guitarra), Darryl Jennifer (bajo) y Paul Hudson (batería) con elementos de la cultura rastafari. Adam Yauch de los Beastie Boys considera a su álbum homónimo de 1980 como el mejor álbum de punk hardcore de la historia y Henry Rollins pensó en ser vocalista cuando HR lo invitó a cantar una rola con ellos, sólo para que se hagan una idea, tios.
A continuación les dejo una jollita: las grabaciones de audio del mítico concierto que dieron en el CBGB en 1982. El DVD Bad Brains live at CBGBs ya circula desde hace un buen rato, aunque no sé que tan fácil resulte conseguirlo, por lo pronto les dejo un video y el disco en cuestión. De nada.





http://http//rapidshare.com/files/142609085/Bad_Brains_-_Live_at_CBGB_1982__The_Audio_Recordings_.rar.html

RURAL CENTRO (Fragmento)

EL GOBIERNO DE HIDALGO CREYÓ QUE SUS GRANADEROS PODRÍAN TRANQUILIZAR LAS COSAS AQUÍ EN VILLA GRANDE. Los periódicos del Centro pensaron que en Hidalgo la vida podría ser carne fresca para un reportaje; por eso me enviaron. Nunca había sentido el calor asfixiante de Hidalgo. En este lugar se concentra lo más vil y lo más ruin del elemento humano. El movimiento de normalistas rurales en paro desde hace ya dos meses se articuló con los trabajadores de las fábricas industriales MEXCOT y LATROF, ubicadas en el que hasta hace poco era considerado uno de los municipios más pobres del país: Villa Grande. Desafiaron a la fuerza pública y la humillaron. Alrededor de 150 personas entre normalistas y trabajadores de las fábricas industriales, tomaron desde el viernes pasado la explanada y el quiosco de Villa Grande. En este momento en todos los noticiarios del país se deben estar transmitiendo imágenes del enfrentamiento entre civiles y granaderos de Hidalgo.

En Hidalgo, específicamente en el municipio de Villa Grande, las huelgas laborales hace mucho que dejaron de ser noticia. En cambio, al interior de la república, las revueltas de los obreros de Hidalgo parecen ser la única noticia candente a últimas fechas. Si pasas el tiempo suficiente en Villa Grande entenderás fácilmente porque a los pobladores de este lugar poco o ya nada les importa las huelgas, a menos que seas normalista u obrero de MEXCOT e incluso aunque no lo seas, la horrible realidad de este lugar te transformara lo suficiente como para que ya nada te importe.

La mayor industria en éste poblado no es, como se piensa en el D.F, la industria química o industrial, sino el tráfico de influencias, el lavado de dinero y las redes de prostitución. Casi no hay narcotraficantes, la droga se vende poco en este lugar, pocos jóvenes. En su lugar lo que existe son lugares destinados a la prostitución de lujo. Políticos, capos, altos mandos de la policía local y gente con el suficiente dinero viene de otros lugares a conseguir putas de lujo, la mayoría extranjeras. Aunado a esto, el folklor local se encuentra rodeado por un halo siniestro. En los vertederos y en las cantinas de Villa Grande se cuentan rumores, se oyen voces de gente que ve cadáveres caminando por los callejones y las calles. Bebes sin brazos, brujas desnudas, mujeres sin piernas, arrastrándose por la calles buscando el tiradero municipal.

Esta mañana se encontró el cuerpo desnudo de Margarita Aldama en su casa del centro. La victima se encontró atada de pies y manos, presentaba señales inequívocas de violencia física en el rostro y el cuerpo. Margarita Aldama tenía 34 años y era la propietaria de La suerte, un local clandestino que operaba como putero al norte de Villa Grande. La suerte, requería constantemente de jovencitas de escasos recursos que optaban por el oficio de puta para ayudarse a sobrevivir. Entre estas jóvenes se encontraba Marina Estrada, de 18 años cumplidos y que desde hace dos semanas se encuentra desaparecida. El día que desapareció salió de su departamento en la avenida 10 de marzo al norte de Villa Grande, se dirigía a La Suerte a empezar la jornada laboral pero nunca llego. Dos días antes la entreviste como material documental para un reportaje sobre tráfico de personas. Ella era natural de Venezuela y ejercía el oficio de puta por necesidad y por ser bien remunerado. A veces un político renombrado de Villa Grande, a través de Margarita Aldama que era la intermediaria, solicitaba sus servicios para fiestas privadas en la que asistirían varios invitados de negocios. Marina asistía a estas fiestas y brindaba sus servicios y aseguro que nunca se le obligó a hacer nada que no quisiera, sin embargo, me confesó, ella había presenciado escenas en las que obligaban a otras muchachas a tener relaciones sexuales en su contra. En una de estas fiestas, me dijo, cuando termino de follar con dos diputados de Sonora que eran amigos del político de Villa Grande, tomó sus cosas y una vez pagada se disponía a abandonar el lugar cuando escuchó que desde una habitación oscura se alzaban gritos, un tipo le gritaba puta a alguien, se escucharon golpes y llantos. Marina sintió miedo y abandonó aquel lugar lo más rápido que pudo. Cuando subió al sedan que el político había destinado para llevarla de regreso a La Suerte, le pareció escuchar dos disparos. Nunca más volvió a asistir a las fiestas que organizaba el político.

Todo lo que sé es que para esta hora ya debe estar muerta.


REGRESÉ A VILLA GRANDE PARA CASTIGAR A GERARDO SALVATIERRA. Por eso volví. Para poner las cosas en su lugar. Él pensó que poco importaría que él fuera el asesino de mi padre y que mi madre llorara hasta el amanecer la noche que le di la noticia. Mi madre ahora también esta muerta, Gerardo Salvatierra no jaló el gatillo esta vez, pero de una u otra manera él también la mató, y no una sino dos veces. La primera vez la mató sin decirle nada, sin tocarla siquiera: la mató con su ausencia. La segunda vez la mató en el mismo momento en que asesinó a mi padre, diez años después de haberla dejado sola en Villa Grande, el día que regresó del norte y la encontró casada y con un hijo de Ignacio Lozano.

De esto hace ya años, veinticinco al menos, pero no hubo noche alguna en que mi madre no llorara desde entonces. La noche que le anuncié mis planes de unirme a la arquidiócesis, incluso aquella noche que dejamos para siempre Villa Grande, ella lloraba, sólo lloraba, sin mediar palabra alguna entre su llanto y su figura. Lloraba tanto que llegue a pensar que ella era toda lágrimas en lugar de sangre. La única noche que no lloró fue la noche en que se le escurrió la vida entre mis brazos.


DANIEL MEDINA FUE EL QUE DIO LA PRIMERA SEÑAL DE ALERTA. Puede que antes Angélica Fuentes en una de sus monumentales borracheras hubiera lanzado al aire aquel infundio, pero en el tiempo en que Angélica empezó a difundir el rumor llevaría por lo menos 15 años de un severo alcoholismo que la desacreditaba incluso ante los ojos del menos respetable en Villa Grande. El problema con el alcohol de Angélica databa de aquel momento en que su esposo, Ricardo Tapia, reconoció que su condición de empleado en la tienda de Lautaro Rentana no podría darle ni siquiera la mitad de los dividendos necesarios para sustentar y alimentar a una familia. Él tenia 22 años, ella 18 y estaba embarazada de tres meses. Todo esto sucedía varios años antes de que la primera fábrica industrial, la primera MEXCOT que producía refrescos y bebidas naturales, se instalara en Villa Grande, muchas hectáreas de riego ya se habían expropiado a lo largo del municipio, eso sí, pero hasta ese momento ninguna fábrica se había instalado. Ante la inminente llegada de un nuevo miembro a la recién formada familia Tapia, Ricardo, enfrentando la imposibilidad de lograr conseguir otro empleo de medio tiempo, decidió que la única solución posible para el desastre en el que él y Angélica se encontraban consistía en dejar el país y trabajar en el extranjero. Así se lo hizo saber a su esposa una noche de marzo. Angélica no le recriminó ni expreso ningún tipo de opinión al respecto, se limitó a servirle de cenar, lavar los platos y llorar en silencio, entre sollozos que a Ricardo le pareció que no podían provenir de su esposa sino de un punto no específico de la humilde habitación que rentaban al oeste de Villa Grande. Esa noche hicieron el amor por última vez. Mientras la montaba, a Ricardo le pasaron por la mente un montón de pensamientos que él hubiera preferido no tener en ese momento. Pensó, por ejemplo, que las estrellas que se veían en el cielo de Villa Grande no eran estrellas normales. No es que hubiera viajado mucho, ni siquiera lo suficiente, como para formarse una idea clara de cómo es que se deben ver las estrellas normales en un cielo despejado, sin embargo, las estrellas de Villa Grande en ese momento le parecieron mucho más grandes y mucho más hermosas que las que había visto en cualquier otro lugar. Que raro, pensó, llevo toda mi pinche vida viviendo en Villa Grande, viendo las estrellas en los atardeceres, en las madrugadas y en los amaneceres y es hora que apenas me vengo enterando de que esas putas estrellas no son normales. Y entonces trato de reírse, o mejor dicho de dibujar una sonrisa en su rostro pero inmediatamente se dio cuenta de que Angélica seguía llorando en silencio. Él la embistió entonces con más fuerza, como si quisiera hacerle daño. Pensó en su madre, quiso saber qué es lo que ella había pensado de aquellas estrellas hijas de puta. Cuando se corrió en el interior de Angélica se dio cuenta de que él también estaba llorando, se tendió al lado del cuerpo de su mujer y la abrazó en silencio. Al día siguiente visitó a Hortensio Salvatierra, el pollero de Villa Grande y tres días después dejó el pueblo.

Al principio Angélica pensó, o al menos quiso pensar, que las cosas irían bien. Ricardo tardaría al menos 15 días en llegar a Tijuana, una vez allí tardaría otros 3 en cruzar el Río Bravo y una vez estando en suelo Norteamericano sería cuestión de un día, dos máximo, en llegar a California, llegado a este punto las cosas serían más que fáciles: conseguiría rápidamente uno o dos empleos como mozo en algún restaurante y procedería a saldar la deuda que había adquirido con Hortensio Salvatierra quien, amigo desde la infancia de Tapia, había aceptado pasarlo sin ningún tipo de adelanto (cosa que por supuesto no habría siquiera considerado como remotamente posible con algún otro cliente) y esperar a que Ricardo se estableciera en California para obtener su pago. Él le prometió a Angélica que le hablaría en cuanto hubiera cruzado la frontera. Pasaron 15 días, un mes, dos meses, y Ricardo jamás le hablo.

Pasaron tres meses y no hubo noticias ni de Ricardo Tapia ni de Hortensio Salvatierra ni de los otros tres fuereños que habían partido de Villa Grande rumbo al norte. En ese momento Angélica supo que Ricardo no iba volver, tal vez se había ahogado tratando de cruzar el Río Bravo junto con Salvatierra y los fuereños, posiblemente habían entrado a algún bar en Tijuana antes de cruzar la frontera y en una riña de borrachos unos narcos los habían acribillado, quizás simplemente se había detenido en algún estado antes de la frontera y se quedo a vivir ahí y se olvido de ella. Estas y mil ideas más le cruzaban por la cabeza, lo único que sabía, que daba por seguro, es que Ricardo no iba a volver. Pensó en esto una mañana en que estaba barriendo los amplios corredores de la Barranca, la Hacienda del jefe de la policía municipal de Villa Grande, Gerardo Salvatierra, el único lugar en el que por lastima le habían dado trabajo; tenía ya 6 meses de embarazo, el bebe pateaba mucho, afuera todavía no aclarecía del todo, eran las 5 de la mañana y a través de un gran ventanal podía ver las estrellas en el cielo de Villa Grande: demasiado grandes, demasiado hermosas. Angélica miró aquellas estrellas y se le partió el corazón.

Dos meses después, en diciembre de aquel año, las labores de parto la sorprendieron mientras trabajaba en la Barranca. La comadrona a la que veía, Amanda Buendía, le había prohibido ir a trabajar o realizar grandes esfuerzos un mes atrás, sin embargo, Angélica no podía darse el lujo de no trabajar, no tenia familiares en Villa Grande, ella y Ricardo habían abandonado su pueblo natal en Guerrero cuando decidieron juntarse definitivamente hacía un año. De manera que sin esposo y sin familia a quien acudir en su delicado estado tuvo que arreglárselas para seguir trabajando. Ese día llego a la Barranca a eso de las 5 de la mañana, barrio la calle y el patio y cuando se encontraba barriendo el potrero la sorprendieron los dolores. A esa hora no había nadie en la Barranca, el jefe Salvatierra y su hija Jimena de 7 años dormían al otro lado de la Hacienda, los demás trabajadores llegaban hasta las siete de la mañana, cruzó el patio sangrando, caminó por el pasillo que daba a la cocina y cuando cruzaba por el comedor perdió el conocimiento.

La encontraron en medio de un charco de sangre a las ocho y media aproximadamente. La señora que trabajaba en la cocina le gritó al capataz, José San Pedro, un tipo bajito de buenos modales que siempre ayudada en la cocina cuando estaba aburrido y las labores en la Hacienda no eran muchos, San Pedro y la señora de la cocina la levantaron y la llevaron al hospital más cercano. Para cuando los doctores del hospital general Sepúlveda, ubicado a las afueras de Villa Grande, la atendieron Angélica había perdido al bebe.

Después de este evento su vida, recordaría más tarde, se redujo a una sucesión de pequeñas desgracias, una tras otra. Ella perdió el trabajo en la Barranca, no tenía dinero para la renta y a duras penas le alcanzaba para comer. No se sabe exactamente en que momento abrazó la bebida, puede que haya sido un día en que fue a la cantina de Román Valenzuela, la Coronita, puede que sólo hubiera ido a pedir una limosna a los parroquianos y uno de ellos, ya encandilado y en busca de algo de diversión, le hubiera invitado un trago. Ella se lo aceptó y después de acabárselo le pidió otro, luego otro y luego otro más, probablemente llegado a un punto álgido de la noche, el parroquiano, que muy probablemente no residía en Villa Grande y sólo fuera ahí de visita o en busca de putas y diversión, se la llevo a su cuarto o a su pensión o a donde fuera que pernoctara a esa hora y la follo mientras ella estaba inconsciente. Cómo se hayan desarrollado los hechos poco importa ahora, ella le agarró gusto a la bebida y ya no la dejó. No mucho tiempo después la echaron del cuartucho que rentaba y se dedicó a vagar por las cantinas de Villa Grande. De vez en cuando encontraba a algún parroquiano generoso que le pagaba sus tragos durante toda la noche y se iba con él y entonces follaban en un cuartucho miserable, ella hubiera querido poder llorar mientras un tipo que no conocía la estaba follando, llorar como la última vez que hizo el amor con Ricardo, pero por más que lo intentara el llanto siempre le rehuía.

De cualquier manera, un lunes 1 de abril, y de esto la propia Angélica cada vez que el mescal Caborca la envalentona y le suelta la lengua lo enfatiza sobremanera, como si en esto se le fuera la vida, los vio por primera vez. Habían pasado ya muchos años de que Ricardo partiera del pueblo, en Villa Grande se habían instalado ya muchas fábricas y cada vez que uno cruzaba por la avenida 10 de marzo, la avenida principal, en dirección al norte y al oeste se podía observar las grandes naves industriales, humeando y haciendo ruidos que se adentraban en la noche. Angélica, después de su habitual tanda de mescales en la Coronita, salió tambaleándose y caminó en dirección al norte, la intención era cruzar la calle Lisandro Mesa y una vez en el cruce con la avenida 10 de marzo enfilar todavía más al norte hasta llegar al basurero general de Villa Grande, casi en los limites del municipio, y pasar la noche entre desperdicios y algunos desamparados que radicaban en el basurero. Caminó, pues, toda la calle Lisandro Mesa, no era muy tarde, serían un poco más de las 12 y media, sin embargo, la calle se encontraba desierta. Angélica sólo podía escuchar el ruido sordo y lejano de las fábricas y el ladrar de los perros. Desesperados, se dijo, esos pinches perros ladran desesperados. Cuando ya iba a la mitad de la avenida 10 de marzo sintió algo, un algo que no podía explicar racionalmente, una mescla entre desespero y pánico repentino. Apretó el paso y justo cuando dejaba atrás las instalaciones de la fabrica MEXCOT, sintió la necesidad de voltear y mirar el camino. Al principio se sintió aliviada, pensó reconocer a lo lejos a varias personas caminando por la avenida, serían quince o veinte, ella siguió su camino y al cabo de unos minutos pensó que era chistoso que una procesión religiosa caminara a esas horas por la avenida 10 de marzo, mucho más chistoso el que lo hicieran en dirección norte, rumbo al basurero de Villa Grande, porque la única parroquia del municipio se encontraba al sur, casi en el otro extremo. Volteó una vez más y esta vez esperó a que las personas se acercaran, se quedo en medio de la avenida para poder verlos mejor, las personas seguían caminando lentamente, ahora le parecieron muchos más que antes, ella seguía mirándolos y pensó que los que venían en frente se veían cansados, tenían las ropas viejas y desgastadas y conforme se acercaban podía distinguir que algunos de ellos parecían traslucidos, opacos. Cuando estuvieron como a 50 metros de distancia se dio cuenta de que cada vez se veían más transparentes, muchos estaban sangrando, había niños y viejos y hombres y mujeres no tan viejos y todos avanzaban hacia ella con una calma desesperante, vio a una niña que caminaba con los ojos al frente, inexpresiva, y vio que le faltaba un brazo. A un lado un viejo avanzaba llorando y una gran mancha roja le cubría la camisa a la altura del tórax, vio a bebes arrastrándose con medio cuerpo, de la cintura hacia abajo desecho. Debió moverse, debió correr y salir gritando, pero no lo hizo, estaba mas sorprendida que atemorizada, se quedo ahí en medio de la avenida y cuando esas personas estuvieron a dos pasos de ella sintió un mareo. La encontraron al día siguiente en medio de la calle entre vomito y orines. Desde entonces cada vez que entraba a una cantina, después de un par de tragos, contaba a todo el mundo en voz alta su historia y nadie le creía o la ignoraban y le regalaban un trago para que se callara.

Algunos años después, Daniel Medida, trabajador de la fábrica química LATROF de México, se dirigió un día mucho más temprano de lo habitual a su turno de doce horas. Había pasado la noche anterior bebiendo con unos amigos en una cantina y cuando se dio cuenta ya eran las 4 y media de la madrugada, él entraba a las 6, de manera que pensó en caminar por la avenida 10 de marzo y esperar una hora afuera de la fabrica a que la abrieran. Así lo hizo, sin embargo, nunca llego a trabajar. En vez de eso regresó a la cantina a eso de las 6 de la mañana y pidió un tequila doble. Ora tú, Daniel, no que ya te ibas a trabajar, güey, le recrimino en juego el joven que atendía la barra. Medina no dijo nada y pidió otro tequila doble, se lo tomó en silencio y cuando hubo acabado alzó la vista y le dijo al de la barra: Esa puta vieja borracha de Angélica Fuentes tenía razón.